jueves, 17 de diciembre de 2009

becas y hasta lonches

Arturo Diez compró porras con despensas, becas y hasta lonches

* Amenazan a beneficiarios de programas sociciales de retirarles el beneficio si no aplaudían al alcalde victorense en su informe

Ciudad Victoria, Tamaulipas.- El alcalde Arturo Diez Gutiérrez explotó en su beneficio programas sociales para acarrear porras y aplausos durante su Segundo Informe de Gobierno, a cambio de despensas, becas, lonches y cocas.

Juan Peña, líder de colonos de la Solidaridad, valiéndose de un programa estatal fue tajante al señalar: ¨el que no acuda al informe del presidente, no recibirá despensa¨, mientras que el programa de becas también era utilizado como medida de presión contra colonos y campesinos para obligarlos a asistir al evento de Diez Gutiérrez.

La necesidad de los que menos tienen, de los que realmente votan a cambio de beneficios para sus hijos, fue esencial en aquellas porras que hacían sonreír ante sus invitados de honor al alcalde victorense.

Por su parte, Rosa Elena Sánchez Álvarez, residente de la colonia Solidaridad, ajena al uso que se daría a sus respuestas, respondió con una amplia sonrisa: ¨Nos trajo Juan Peña, es el líder de la colonia, él nos entrega las despensas cada quince días en el barrio¨.

Acompañada de tres mujeres mayores de 70 años, que nunca podrían subir las escaleras para llegar al tercer piso del Centro Cultural, estaba afuera del recinto oficial del informe, donde sus vecinos a cambio de la despensa de Sedesol, gritaban ¨Se ve, se siente, Arturo está presente¨.

Era una porra obligada por su necesidad de subsistir, de comer, de tener una beca para sus hijos.

El 30 por ciento de las mujeres que asistían, llevaba en sus manos una pequeña bolsa de plástico y en su interior carpetas con documentos, cuando salieron todas enfilaron hacia un edificio blanco donde llegaron más de ochenta para tramitar sus becas del programa ¨Sin Barreras¨.

Todavía llevaban en su cuello, el pase como invitadas especiales al segundo informe de Arturo Diez Gutiérrez, quien presumía en el estrado haber traído las tiendas Oxxo y en el video que se transmitía pasaban imágenes de su rancho El Molino, un predio dedicado a la tala de la sierra.

Con bolsitas de plástico conteniendo en su interior la mísera mitad de un lonche de pan de barra compuesto de jamón y mayonesa, los campesinos adheridos a la CNC, ya ocupaban un lugar en el tercer piso del centro cultural, mientras que aquellos que no alcanzaron butaca estaban sentados y entre sus piernas sostenían un refresco de lata que les dieron al descender de los microbuses donde fueron acarreados al segundo informe.

Denigrante para un político que llegó a la presidencia municipal con el voto popular, ahora obligaba a los beneficiarios de los programas federales y estatales a asistir a su informe si querían seguir recibiendo estos beneficios.

Un sujeto que llevaba colgado a su hombro izquierdo una bolsa con la leyenda Confederación Nacional Campesina, tenía en sus manos una lista y conforme iban llegando hombres de campo con su sombrero puesto, los palomeaba en una lista y les daba un sobre blanco, no se inmuto cuando se le tomaron graficas, solo se cambio de lugar y se acerco a un hombre que llevaba camisa blanca con logotipos del programa ¨Vamos Tamaulipas¨, con quien intercambio palabras en voz baja.

El mismo sujeto de chamarra amarilla que se negó a revelar su nombre, guió a los grupos de personas a la esquina de Belisario Domínguez y Miguel Hidalgo, donde siete microbuses y dos camiones International para pasajeros, esperaban a aquellas humildes personas residentes de las colonias y ejidos.

Las fotografías de lo narrado se encuentran al final de esta nota, donde se ve a los campesinos de pie aplaudiendo al edil, cuando caminan más de ocho cuadras hacia el transporte y donde tienen su pequeña bolsa con el medio lonche que se les dio para asistir.

Tanto era el fervor de los seguidores de Arturo Diez por aplaudirlo y escuchar su informe de dos horas y media, que apenas habían transcurrido 30 minutos y ya estaban dormidos, mientras el presumía las obras del gobierno federal y estatal como suyas, incluyendo la Feria Estatal.

El colmo del cinismo de Diez Gutiérrez se vio reflejado cuando se proyectaba el video de una pelea de box, donde los asistentes le lanzaron sonora rechifla que fue publicada a nivel nacional.

Durante su salida del Centro Cultural, Arturo Diez fue abordado por una reportera que demandaba el pago de una factura pendiente de su medio de comunicación y este le dijo frente a un nutrido grupo de personas como ufanándose de la situación, ¨Hazle como quieras, si los periódicos grandes no me han tumbado, menos tu revistitita ¨, cuando la joven lo único que buscaba era la liquidación de una publicación donde probablemente se daba a conocer alguna virtud muy escondida del alcalde.

Pero esto es de esperarse de un hombre sin escrúpulos, que orgulloso presumió a su hijo durante el informe, un joven menor de edad con serios problemas de alcoholismo, lo cual quedó de manifiesto cuando en completo estado de ebriedad chocó y su sequito de corruptos colaboradores intentaron ocultar los hechos a la prensa con jugosas sumas de dinero.

Con menos probabilidades que Francisco Javier García Cabeza de Vaca, para llegar a la Gubernatura, el depredador número uno de la ecología tamaulipeca, está fuera de sus cabales, al atropellar a los victorenses cerrándoles la pista de hielo por dos horas para que sus hijos y familiares se divirtieran en dos ocasiones distintas.

El informe de Diez, fue calificado como una farsa, mientras que las porras seguidas de aplausos, fue sólo un montaje producto de la necesidad de los colonos y ejidatarios, a cambio de despensas, becas, lonches y cocas.

fuente: metro noticias

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